Es el primer elemento de
la investigación científica y la primera herramienta del criminalista para
captar, buscar los indicios materiales, seleccionarlos y comprender e hecho
criminal: la observación que se realiza
es metódica y al hacer la interpretación de lo observado va guiada por el
conocimiento especializado de las diferentes disciplinas que conforman la Criminalística;
se utiliza el método deductivo que va de lo general a lo particular y de lo
particular al detalle y luego al mínimo detalle. La observación comprende cinco componentes a saber:
Objeto
de la observación:
Es la escena del crimen con todos los elementos que la conforman, el sitio del
suceso, victimas, medios de comisión o
instrumentos usados y las diferentes evidencias producidas.
El
observador:
Es el experto en Inspecciones Técnicas y
el mismo debe estar preparado científicamente en las labores que se realizan en
la escena del crimen y tener conocimientos de la Criminalística General, Medicina
Forense, Ciencias Jurídicos , especialmente del proceso penal.
Los
medios de observación:
Son los órganos sensitivos mediante los cuales el experto analiza la escena del
crimen con sus evidencias, comprende todos los sentidos humanos, menos el
gusto; de igual manera, toda la técnica, instrumental y procedimientos necesarios
en esta labor.
Las
circunstancias de la observación: Son las condiciones, parámetros o lugares donde el experto
criminalista se confronta con la escena del crimen y las mismas circunstancias no son
intencionadas por el experto que observa y estudia las evidencias localizadas.
Cuerpo
de conocimientos:
La observación debe estar definida por un cuerpo de conocimientos metódico en función
de la naturaleza del objeto o evidencia física a estudiar, que reconozca de
manera clara el objeto observado, desde diferentes maneras en su estructura,
posición, forma, dimensión, color, origen naturaleza, etc.
Bibliografía: Ruiz, W. (2013) Criminalística. Investigación Científica
Probatoria. (3ra Ed) Barquisimeto, Venezuela. Editorial Horizonte, C.A.